Esta semana seguimos llenando el verano de color.
Hoy os presento una gargantilla y unos pendientes con turmalinas.
Ambas piezas tienen forma de espiral lapidado y de su parte inferior cuelgan unas turmalinas de diferentes colores. Los pendientes son de tuerca de presión y la cadena de la gargantilla es de modelo rolot.
Como curiosidad os diré:
Las turmalinas eran conocidas desde la antigüedad en la cuenca mediterránea pero no es hasta 1703 cuando los mercaderes holandeses la introducen en Europa occidental desde Ceilán (actualmente Sri Lanka) denominándola turamali “piedra de diversos colores”.
La podemos encontrar en una extensa variedad de colores, de este modo podemos hablar de Acroíta(incolora), Ruberita (rosa- roja), Dravita (amarillo –pardo), Verdelita (verde), Indicolita (azul), Siberita (lila-violeta), Chorlo (negro) y Paraiba (colores electricos).
Es característico de las turmalinas presentar distintos colores, en un mismo cristal, ordenados por zonas. También podemos encontrar los colores ordenados concéntricamente como es el caso de la “turmalina sandia” (interior rojo y exterior verde).
Tienen usos científicos y tecnológicos en aparatos de medición y radiofonía debido a sus propiedades de piezoelectricidad y piroelectricidad (se cargan eléctricamente).
Como Turmalinas históricas destacan las de las joyas de corona rusa del siglo XVI consideradas rubíes debido a su gran parecido.
La emperatriz Tzu Hsi quién gobernó china al finalizar el siglo XIX era una apasionada de esta gema usándola en su vestuario, actualmente su cabeza descansa sobre un cojín de turmalinas.
Como yacimientos más importantes podemos encontrar Brasil (minas Gerais y Paraiba), Rusia (montes Urales), Sri Lanka, Isla de Elba (Italia), EEUU, y África del sur (Tanzania, Namibia, Mozambique, Madagascar).